Mis queridos hijos,
Estoy triste de veros tanto sufrir
Sé bien que usted vive momentos difíciles y que no es siempre fácil de tener la esperanza.
Sobre todo después de todo lo que ha pasado últimamente.
Pero no se dejen influir por todas estas energías negativas, quédense siempre centrados sobre la energía del amor Divino, sobre la más bella energía que sea.
Ustedes son unos creadores, sus pensamientos son creadores. Entonces traten de crear un mundo de paz y de amor. Un mundo de tolerancia donde cada ser humano tendría su plaza en el respeto de cada uno.
Mis hijos ustedes tienen la elección, no sufren su vida, viven la.
Cada día comience el día con un pensamiento positivo.
Un pensamiento de amor y de paz y usted verá que todo cambiará.
Cuanto más ustedes serán numerosos a crear el positivo, más las cosas cambiarán.
Ustedes no son sólo mis queridos hijos estamos aquí para ayudarse.
Entonces abran sus corazones al amor Divino por el bien de todos.
Le envío un beso de paz.
Madre Divina